domingo, 6 de abril de 2014

Reparación de detector de CO (monóxido de carbono)

USE LO QUE AQUÍ SE DICE BAJO SU PROPIA RESPONSABILIDAD. NO SE GARANTIZA EL BUEN FUNCIONAMIENTO DE NINGÚN APARATO TRATADO SEGÚN LO QUE AQUÍ SE DESCRIBE.

EL MAL FUNCIONAMIENTO (POR UNA MALA REPARACIÓN, POR EJEMPLO) DE UN DETECTOR DE MONÓXIDO DE CARBONO (CO) PUEDE DAR LUGAR A CONSECUENCIAS MORTALES.

Lo que a continuación voy a describir es más como un ejemplo de reparación que como una reparación en sí misma, ya que las consecuencias de un mal resultado pueden ser fatales.

Tengo un detector de CO (modelo CHACON 34142/C1201) que compré hace años para usar en el pueblo pero luego, por no tener estufa en el pueblo, dejé de usarlo. Allí se quedó, sin pila y cogiendo polvo (¡mucho polvo!).






Hasta hace poco, que lo rescaté.

Pensé darle una utilidad en la cocina de casa, donde tenemos una caldera de gas. Siempre ha funcionado muy bien pero, si un día fallara y generase malos gases, este instrumento podría salvarnos la vida.

La primera prueba fue ponerle una pila de 9 voltios en condiciones. Al ponerla hacía un breve pitido y nada más. El LED que indica que está en funcionamiento no se encendía.

Tiene un botón de prueba. Al pulsarlo tampoco mostraba ninguna actividad.

Por la parte de atrás tiene un texto que dice que hay que cambiarlo cada 5 años. A decir verdad, no recuerdo cuándo lo compré, pero no creo que haya hecho ese tiempo.

CONCLUSIÓN: de tener que tirarlo, siempre queda la posibilidad de echarle un vistazo al interior.

Sabía que no había sufrido maltrato ni mal uso por mi parte en el pasado. Lo que tuviera estaba relacionado con el paso del tiempo y con un entorno polvoriento y, a veces, algo húmedo.
Para desensamblar esta unidad no hay que quitar tornillos pero sí que es útil un destornillador o dos para apalancar las pestañas que sujetan la tapa al cuerpo principal. Tiene cuatro pestañas. Yo lo apalanqué sin mucho cuidado y rompí una de las pestañas. Pero con las otras tres se sujeta bien.
Lo desmonté y vi que tenía mucho polvo por dentro. El sensor es una cajita con una ventanita circular tapada por una especie de filtro de papel. Pero este filtro no tenía aspecto de sucio. Aún así, le pasé suavemente mi dedo para retirar cualquier partícula que pudiera ser invisible a mi ojo desnudo.

Procedí a limpiarlo con un cepillo de dientes mojado en etanol de 96ºC. La razón de usar etanol es que es un disolvente que se evapora muy rápido y no es tan conductor como el agua.
Con el etanol vi que se deshacían las carcasas de los ICs y de los transistores, dejando además un rastro negro, así que, NO USAR ETANOL LA PRÓXIMA VEZ.
Luego retiré el etanol sobrante con una tela de algodón y bastoncitos de limpiar orejas. Por si acaso quedaban restos, lo dejé secando unas horas.


Con una lupa potente revisé que todos los componentes electrónicos y las pistas del circuito tuvieran buen aspecto. Así era.

Probé a ver si funcionaba entonces pero sólo conseguí que el LED indicador empezara a parpadear. Aun así, ¡eso era una buena señal!

Pero el parpadeo era rápido, como cuando está siendo activado pulsando el botón de TEST. Eso no era normal. Volví a revisar las pistas y los componentes. Observé que habían quedado muchos restos de hilos de algodón atrapados en las soldaduras y en los componentes. En un aparato tan sensible como este, esas pequeñas fibras podían dar lugar a falsos contactos, así que procedí a cepillar otra vez componentes y pistas. En algún momento noté que el parpadeo empezaba a ser lento, lo cual indicaba que el dispositivo estaba funcionando normal.

El pulsador de prueba (TEST) seguía sin hacer ningún ruido, así que empecé a sospechar del "altavoz" que genera el sonido.

El altavoz es del tipo piezoeléctrico y está compuesto por tres metales: uno grande circular y, sobre este, otro más pequeño en forma de anillo, y un tercero, en el interior del anillo, también de forma circular. Para cada una de estas láminas existe un contacto en el circuito. La razón de que haya tres supongo que es para conseguir un sonido parecido al de una sirena de dos tonos.

El altavoz tenía aspecto de estar oxidado en sus láminas más pequeñas. Así que las he lijado con cuidado hasta que ha salido el metal limpio.


Una vez hecho esto he vuelto a montar todo otra vez y... ¡eureka! El pulsador ha comenzado a hacer su función: el LED parpadea más rápido y suena un ruido estridente a través del altavoz.

Pero... ¿puedo asegurar de que el dispositivo funciona bien?

Por si acaso, he hecho la siguiente prueba:

en la terraza abierta he quemado una hoja de periódico en una maceta vacía. La hoja ha desprendido humos, como es lógico, y he puesto el dispositivo cerca de los humos. Efectivamente, el detector se ha puesto a emitir el ruido característico de la alarma. Al apartar el instrumento se silenciaba y volvía a emitir al acercarlo. Con lo cual creo que ha quedado bastante probado su buen funcionamiento.

NOTA: todo esto nos demuestra que muchos aparatos los podemos arreglar si les dedicamos algo de tiempo y usamos la lógica. Además, tenemos una poderosa herramienta que se llama Internet para informarnos primero y después aclarar dudas que nos surjan en el camino. Cuantas más cosas arreglemos o intentemos arreglar, más aprenderemos y más fácil será la próxima vez que nos pongamos manos a la obra.

Usar esta información con prudencia. No olvidar lo que dije al principio: un detector de CO es un equipo que, según las circunstancias, puede salvarnos la vida. Y si no funciona como debería por causa de una mala reparación, puede ser fatal.

NOTA 2: en caso de que el dispositivo detecte CO y tengamos fundadas sospechas de que hay mucha cantidad de este gas en el ambiente (porque nosotros o alguien en la estancia sienta un sueño pesado, mareos, etc.) debemos abrir puertas y ventanas que den al exterior y salir de la habitación o vivienda lo antes posible. Si nos desmayamos dentro de una zona con excesivo CO y nadie nos saca a tiempo, moriremos en unos minutos. Si hay que perder el conocimiento, que sea en el exterior, donde el aire corra libremente.

Las llamadas a bomberos, ambulancias, protección civil, etc. hacerlas en lo posible desde el exterior, con un teléfono móvil, por ejemplo.

Altos niveles de CO causan dolores de cabeza, naúseas, respiración agitada, mareos, confusión, daño cerebral y, en algunos casos, la muerte.

La vida media del CO en la sangre es de 4 horas, supuesto que se esté ese tiempo respirando en una zona libre de CO. (Vida media = tiempo que tarda en reducirse a la mitad una cantidad determinada).

NOTA 3: los detectores de CO a veces dan falsas alarmas y la gente puede llegar a hartarse y apagarlos o quitarles la batería. Por eso se recomienda ponerlos en lugares que no sean la cocina. Si la vivienda tiene dos o más alturas, hay que poner al menos uno en cada planta. También se recomienda poner varios en toda la vivienda. El lugar preferido es en las paredes, a una altura entre 15 y 30 cm del techo. Yo también pondría alguno cercano al suelo, porque el CO pesa algo más que el aire.

Personalmente recomiendo instalarlos en las habitaciones donde haya chimenea francesa, estufa de leña/carbón/pellets, salamandra (estufa de carbón de combustión lenta), brasero (un tipo de hornillo para calentar los pies) o cualquier otro artefacto de combustión o que use llama al descubierto.

El monóxido de carbono se produce principalmente al encender una de esas estufas y también cuando se están apagando. Por eso, unos rescoldos en una habitación o casa mal ventilada pueden acarrear la muerte de sus ocupantes, cosa esta que ocurre con cierta frecuencia en todos los países del mundo.

También los motores de los vehículos producen mucho CO y, si están en un local cerrado (p.ej. garage) pueden dar lugar a la muerte de sus ocupantes.

Un simple horno de cocina, al calentarlo fuertemente, puede generar CO que escapará por las rendijas de la puerta o por cualquier sistema de salida de humos que tenga. Si estos van hacia la cocina, hay peligro para los habitantes. Se recomienda abrir ventanas y/o  poner en marcha una campana extractora para conseguir una renovación de aire que evite la acumulación de CO.

En caso de sospecha de intoxicación de alguien por CO, llevarle al hospital o avisar a una ambulancia, para que le hagan una prueba de carboxihemoglobina en sangre.

En todo caso, ándese con cuidado con el CO. Es un gas invisible, sin olor ni color, no irritante, altamente tóxico, que se acumula en nuestra sangre, ocupando el lugar del oxígeno en la hemoglobina, y que mata por asfixia a miles de personas cada año en todo el mundo.


Fuente: http://www.homeenergy.org/show/article/nav/kitchen/id/1152

No hay comentarios:

Publicar un comentario